jueves, 7 de septiembre de 2006

A grandes males, grandes remedios

Uno de los síntomas que, a mi parecer, son claramente indicativos de que la banda de rock evoluciona es que puede salvar escollos. Y sin duda, el hecho de que uno de los compañeros se lesione seriamente y le resulte imposible tocar, es un problema bastante importante. Pero la máquina no se puede parar cuando tiene un problema, al igual que una ciudad no se para cuando se incendia un edificio o el tráfico cuando hay un accidente. Siempre se buscan vías alternativas, que aunque no ofrecen la comodidad de la vía de siempre, son caminos provisionales para llegar a un destino.
Pues de esto se trata. El saber adaptarse a las situaciones. Buscar el camino, que por lo general es mas incómodo que el camino rutinario, para seguir trabajando, para seguir tocando. Obviamente existen limitaciones. Es decir, la banda de rock no puede salir a tocar ahora mismo. Pero como ya se escribió en otro comentario de este blog, una banda de rock no es solo salir a tocar.

La labor compositiva de este pequeño parón está siendo sencillamente aplastante, en cierto modo contrapronóstico. Y la palabra clave es evolución. A todos los niveles. Evolución instrumental, evolución musical, evolución en el método y evolución personal y como grupo también. Siento que, al tener que arrimar el hombro todos para salvar el problema, nos hemos acercado mas, si cabe, unos a otros y eso es mas que positivo. Los frutos de esta hornada de creatividad están creciendo rápidamente, y eso me llena de orgullo. Aunque también se ha vuelto a corroborar que la inspiración no es un producto que venga enlatado y puedas conservar para cuando la necesites.
De todos modos todos sabemos que existe una cierta "dependecia de escenario" y la banda está deseando salir a morder. Ya va quedando menos, pero la nueva temporada de conciertos promete. Porque las sorpresas siempre son gratas y si además sorprenden, mucho mejor.

Me gusta lo que veo, y lo que es mas importante, me gusta lo que siento y escucho. Parece que al final si que va a ser verdad que "a grandes males, grandes remedios" y la verdad es que el remedio está resultando ser el empujón que necesitabamos para la nueva motivación que queríamos llegar a alcanzar,... y de hecho hemos alcanzado.

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