domingo, 29 de junio de 2008

Noches de Rock (II)

La noche del viernes pasado fue para la banda, una noche especial. No fue precisamente el mejor concierto musicalmente hablando. También parece que la suerte no nos acompañó debido a los problemas técnicos que fueron surgiendo. Pero se demostró que sobre las tablas había una banda compacta. Una banda que supo sacar de dentro un torbellino lo suficientemente potente para calentar al público del cabeza de cartel.

Me sentí orgulloso de ver ojos cristalinos la noche del pasado viernes. La unidad es cada vez mayor y eso es el mejor combustible para el motor del Rock. Y la noche vallecana, una vez mas, fue testigo.

jueves, 26 de junio de 2008

La universidad del Rock

Este fin de semana en Kobetamendi, se instituyó la Universidad del Rock. Y es que el cartel del festival prometía. Elementos de la talla de Gamma Ray, Dio, Judas Priest y los gigantásticos KISS no podían sino dar una clase magistral de Rock. Como decía en mi anterior blog, el relevo generacional es algo que debería ir produciéndose poco a poco pero sin pausa, y no cambio de opinión. Pero después de ver como los grandes mitos vivientes como Dio, Judas Priest o KISS siguen en un estado de forma excepcional, creo que aún nos quedan mitos para muchos años.

Que tendrá el Rock que es capaz de hacer que 50.000 o 60.000 o la cantidad de gente que fuera los que estabamos en Kobetamendi el pasado fin de semana cantemos al unísono "Long Live Rock n'Roll" y a servidor se le pongan los pelos como escarpias, al ver a toda esta cantidad de gente unida, hermanada. Pero cuando de verdad te das cuenta de que eres un afortunado por conocer y disfrutar el Rock es cuando KISS sale a escena y durante todo el show te encandilan de tal modo que no eres capaz de separar la vista del escenario, y dos horas y media de actuación son como cinco minutos. Y aún hay mas, cuando después del show no puedes contener toda la emoción y rompes a llorar como un crío, y terminas abrazado con toda la banda, te das cuenta de que conocer todas las emociones que trae el Rock puede suponer dos o tres vidas. Y me gusta.

Éste que os escribe terminó el show de KISS con lágrimas de emoción en los ojos. Abrazado a la gente por haber disfrutado juntos de algo que, sincera y personalmente, creo que es el paradigma del show y el Rock en general. Algo inolvidable. Una experiencia que queda para toda la vida marcada a fuego en la memoria y siempre, con el Rock por delante.

El pasado fin de semana fuimos alumnos en la Universidad del Rock. Aun pasando las penurias típicas de cualquier festival, mereció la pena. Porque la experiencia vivida ha sido tan intensa que podré contárselo a mis nietos algún día, como si hubiera pasado el día anterior.

El Rock es algo grande. Me siento afortunado de pertenecer a esta gran familia.

miércoles, 25 de junio de 2008

Hambre de Rock

Siempre ocurre lo mismo. Cada vez que la banda ve en directo a otra banda mas grande, aprende y le incita a superarse a sí misma. Y es que con concierto en ciernes y después de haber vivido un fin de semana de conciertos prácticamente continuos, las cinco cabezas no pueden dejar de pensar y de crear.

Para algunos puede parecer pretencioso o simplemente tratar de imitar a los grandes. Pero yo lo considero un aprendizaje muy importante. El hecho de tomar como ejemplo a bandas de amplia trayectoria enriquece a la banda que, aunque lógicamente con muchísimos menos medios, trata de superarse a sí misma en cada concierto. Cada noche que la banda sale a tocar hay un detalle que la hace diferente, y eso es muy positivo.

El viernes habra sopresas, pero sobre todo, habrá rock and roll.

miércoles, 18 de junio de 2008

Los dinosaurios del Rock

Este fin de semana, todos los que estáis en este mundillo lo sabéis, se monta en Bilbao un festival algo especial para nostálgicos como yo. Y es que KISS en persona son cabezas de cartel el segundo día. Lo cierto es que cuando alguno de estos astros del Rock aparece por algún festival (Ozzy y Motörhead el año pasado en Zaragoza por ejemplo) la expectación y aceptación que crea a nivel general es bastante grande.

Pero mi reflexión es la siguiente: seguimos alimentándonos a base de Rock y canciones de hace 30 años. ¿Que ocurrirá cuando bandas del calibre de KISS o Iron Maiden desaparezcan? Porque lo harán, es ley de vida. El Rock hoy por hoy creo que goza de buena salud, pero también pienso que el relevo generacional es inminente (o quizá no tanto, pero si necesario).

Aún con todo esto, el cartel de este fin de semana es increíble para muchos y sencillamente sensacional para el resto. Nos espera un buen fin de semana de Rock en estado puro.

miércoles, 11 de junio de 2008

¿Rock? Permita que me ría...

Hoy en uno de estos magníficos periódicos gratuitos que reparten a la entrada del Metro de Madrid, aparecía una "noticia" bastante curiosa (y cito textualmente): "Los nuevos amos del rock... los niños". El primer pensamiento que se me ha venido a la cabeza ha sido que por fin, los conciertos van a celebrarse para todos los públicos y no para personas que, según algunos, ya tienen uso de razón. La decepción al leer el artículo estaba cantada.

El texto hablaba de que el rock se ha convertido en cosa de niños y que la "prensa especializada" (quisiera ver yo esas fuentes especializadas) los califica como el futuro del Rock, citando (textualmente) "bandas como Tiny masters of today, Operator please o las españolas Prin'Lalá, preadolescentes con experiencia como instrumentistas y una decidida actitud de estrella muy alejada del pop juvenil de bandas como Tokio Hotel."

Y después de leer esto, comprendemos muchas cosas. ¿Alguien de los que critica la mal llamada "música comercial" (yo la llamaría música dirigida) se ha parado a analizar esto? Aquello que nos corroía las entrañas hace unos años, resulta que se está introduciendo poco a poco en el mundo del Rock y no nos estamos dando cuenta.

Actitud de estrella, amplia experiencia como instrumentista... Que alguien me corrija, pero siempre pensé que el Rock se forjaba en los locales de ensayo y a base de mucho y muy duro trabajo. Y hablo del Rock, no de la industria del Rock, que eso es otra historia.

Este que os escribe con 13 años también quería ser una estrella del Rock. Emulaba a mis ídolos frente al espejo de mi habitación con una guitarra clásica, como todo hijo de vecino. Y soñaba con un mundo que visto con ojos de chaval inmaduro y sin experiencia es perfecto. Afortunadamente hoy puedo decir que disfruto de la música, porque he tenido la oportunidad de vivirla durante muchos años y con una evolución lógica. Y que sea así por muchos años.

Sinceramente, dudo que un preadolescente de 13 años tenga la capacidad y la experiencia para crear Rock, por mucha actitud de estrella que sí tenga, con todo lo que ello conlleva. Mas que nada porque la experiencia siempre ha sido un grado. Claro que hoy por hoy, cualquier cosa es Rock.

lunes, 9 de junio de 2008

Noches de Rock (I)

La noche del sábado fue una de aquellas para dejar inmortalizada en la memoria. Unos buenos amigos de la banda (tanto que nuestro cantante colaboró cantando un par de temas) debutaban como grupo y algunos de ellos pisaban por primera vez un escenario. El recordar en sus rostros los nervios y la adrenalina de la primera vez fue muy satisfactorio. Y no quiero decir, que con el tiempo y la experiencia se pierda esa sensación fantástica y única de subirse a un escenario, pero la verdad es que la primera vez que experimentas el Rock desde el otro lado del escenario, ya no puedes dejarlo. Y cada vez quieres mas. Y sí, efectivamente existe una especie de componente sexual en todo esto.

Ví Rock esa noche. Ví un grupo disfrutar de la música. Se notaba vibrar el aire. Había ilusión y satisfacción en aquellos ojos y yo me alegré por ello.

Pero, y como era de esperar, el Rock no acabó en un escenario y la noche se alargó hasta la mañana siguiente. Eso son noches de Rock and Roll. Siempre para el recuerdo.

"You drive us wild, we'll drive you crazy"

martes, 3 de junio de 2008

El Rock, los Lunes y la una de la madrugada

Lo mas común es que, para bandas que no vivimos (porque no podemos) vivir del Rock, sea complicado ponerse de acuerdo y coordinar las vidas de todos para que converjan en un mismo punto, en un mismo momento. Efectivamente hablo de los ensayos. Nunca se ensaya tanto como se quisiera porque, principalmente, no se puede vivir del aire aunque mas de uno lo ha intentado alguna vez, con un desenlace algo nudoso.

El caso es que por exigencias del guión muchas veces toca ensayar al final del día. Las ocho de la tarde, las nueve o incluso las diez. Y efectivamente siempre se desmadra la cosa. Estar haciendo Rock un Lunes a la una de la madrugada, sin importar el dormir poco para el siguiente día, simplemente por el gusto de hacerlo me parece Rock en estado puro.

Sino que baje Hendrix y lo vea.